La Misa en si menor, BWV 232 es una pieza sacra escrita por el compositor barroco alemán
Johann Sebastian Bach. En el legado de
Carl Philipp Emanuel Bach aparece como «Gran Misa Católica», aunque no está claro a qué se refiere a dicha denominación, si es un uso propio de la familia Bach o se refiere a que están musicalizadas todas las partes de la Misa católica.
Según los investigadores, buena parte de sus 25 piezas son «parodias» (en el sentido antiguo aplicado a este término, se refiere a un material original del propio autor reutilizado en una obra nueva).
La cronología de la misma no está muy clara, pero ciertos estudiosos proponen el año 1724 para la terminación del «Sanctus» como obra independiente, 1733 para la composición de la «Misa» (que constaría del «Kyrie» y «Gloria») y hacia 1749 composición del «Symbolum Nicenum» (Credo); desde ese año continuó la ampliación de la obra con la escritura del «Sanctus», composición y escritura de los restantes movimientos desde «Hosanna» hasta el «Dona nobis pacem» y encuadernación conjunta de todas las partituras.
En los últimos años de su vida, Bach amplió los movimientos que había escrito hasta completar la misa.
Si bien Bach no dejó testamento, el manuscrito original fue a parar a manos de Carl Philipp Emanuel Bach y adquirido más tarde por el musicólogo y editor suizo Hans Georg Nägeli. Aunque recientemente se está debatiendo la posibilidad de una interpretación en Viena en tiempos de Bach, se considera que la primera interpretación pública (aunque parcial) tuvo lugar en 1834/1835 por la Berliner Singakademie dirigida por su director Carl Friedrich Rundhagen; el primer proyecto de edición data de 1816 por parte del editor Wesley. La primera interpretación completa no se dio hasta el año 1856; fue en Francfort, a cargo de la Asociación de Santa Cecilia de aquella ciudad. La primera edición se realizó en 1845 por el citado Nägeli. En el 2015, el manuscrito de la Misa fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.